La carta de Rima

“Querido primo Khalifa,

te escribo de nuevo para contarte una cosa bastante rara que me ha pasado el otro día cuando llegué a clase de gimnasia.

El profesor, entrando por la puerta, me dijo que llevaba una sudadera muy bonita. Yo le contesté que la había comprado en Siria. Me miró bastante desconcertado y me dijo que si en serio en nuestro país existe ADIDAS. Yo lo miré sorprendida y le dije que sí, que es cierto. Entonces mis compañeros que se habían acercado empezaron a preguntarme cosas absurdas como por ejemplo que si en Siria había zapatos de tacones, otro incluso que si teníamos mesas porque sabía que los árabes comen con las manos sentados por el suelo, otro si yo me duchaba con el hijab puesto.

Mira, con todo lo que tienen aquí para informarse me sorprende mucho que en 2012 todavía no conozcan estas cosas.

Yo me enfadé bastante por lo que me habían preguntado (incluso cosas íntimas) y estaba a punto de llorar cuando un compañero mío se acercó y me pidió disculpas por unas preguntas tan torpes. Luego me confirmó que la mayoría de las personas aquí en Italia piensan que en Siria no tenemos ni los coches y que usamos el camello para desplazarnos.

Como ves, aquí no saben nada pero creen saberlo todo.

Cuéntame como estás.”